La NAVIDAD, de acuerdo a las tradiciones judeo cristianas en
las que se encuentra inmersa nuestra cultura, constituye el marco de festejos,
que suelen reunir a las FAMILIAS. Las fiestas navideñas, de suyo colmadas de
CALOR humano, son, no obstante lo que se diga en contrario, un tiempo marcado
por la lógica MERCANTIL como todo en el sistema CAPITALISTA. Todavía más, la
cada vez más notoria DECADENCIA de la sociedad capitalista se expresa con mayor
claridad en acontecimientos que sólo aparentemente se dan al margen de esta
realidad. Han sido estos días, los ÚLTIMOS del año 2012, plenos de noticias
TRÁGICAS como la de la TERRIBLE masacre
de NIÑOS y adultos acaecida en la escuela primaria Sandy Hook en la ciudad de
Newtown, perteneciente al estado de Connecticut en los Estados Unidos y las
posteriores MATANZAS que NO cesan en la propia Unión Americana y en el resto
del orbe, incluido nuestro país.
Nos han conmovido intensamente las imágenes de PADRES de
FAMILIA conmocionados por la MUERTE de sus pequeños hijos e hijas en la
población de Newtown y tal vez sea el momento en que una sociedad
estadounidense regularmente INSENSIBLE ante el DOLOR de otros pueblos que
sufren GUERRAS que SU gobierno PROVOCA en distintas latitudes del mundo, se
sienten a REFLEXIONAR sobre el tema de que NO es lo mismo llevar la MUERTE y la
TRISTEZA lejos de su país, que LIDIAR con estas DESGRACIAS en CASA.
Desde luego que nos unimos al PÉSAME universal por la muerte
de 20 NIÑOS de 6 y 7 años de edad y 7 adultos en una acción CRIMINAL horrenda,
no podemos menos que expresar nuestros respetos y conmiseración por el DOLOR de
padres que enviaron a sus hijos a la escuela sin saber que sería la última vez
que los verían con vida. Sin embargo, sólo unos días atrás fuimos testigos de la
MASACRE que Israel cometía contra niños PALESTINOS y aquí mismo en México,
apenas ha culminado un sexenio que NO dudamos en denominar “DE LA MUERTE” por
las DECENAS de MILES de MUERTOS, muchos de ellos NIÑOS que cayeron víctimas de
una guerra ABSURDA que, no obstante su notoria INUTILIDAD, el gobierno que
presidió el USURPADOR Felipe Calderón, INSISTIÓ en continuar. Pero la guerra de
Calderón no sólo generó MUERTOS sino NIÑOS HUÉRFANOS y familias DESTRUIDAS que
se justificaron con un discurso que envidiaría el mismo HITLER. Calderón, que
presumió en su campaña tener las MANOS LIMPIAS, salió con ellas CHORREANDO de
SANGRE.
En virtud de hechos tan horrendos como los mencionados y
otros que a diario colman de LUTO a los seres humanos, afirmamos entonces que
asistimos a una manifestación más de la LOCURA que representa la RACIONALIDAD
CAPITALISTA, esta racionalidad que está basada en el predominio ABSOLUTO de las
relaciones monetario-mercantiles y en la preeminencia de la MERCANCÍA. El
CAPITALISMO de nuestra época ha llevado a la HUMANIDAD por los senderos de la
más terrible DESHUMANIZACIÓN y lo ha hecho de la mano del FABULOSO negocio que
representa la VENTA de ARMAS y la más cínica COMERCIALIZACIÓN de todo lo que
representa la DEGRADACIÓN del ser humano.
Deslumbrados por la PUBLICIDAD y la abrumadora presencia de
la MERCANCÍA, podemos seguir en la COMPRA-VENTA compulsiva de lo que
encontremos a nuestro lado y así hasta el triunfo absoluto de la LÓGICA de la
LOCURA.
Lo menos que se puede hacer es ADVERTIR que por esta vía,
efectivamente, nos encaminamos al FIN del MUNDO y de la HUMANIDAD.