Como este columnista lo prometió, el día de hoy daremos cuenta de un hecho que ILUSTRA acerca de las respuestas que el PUEBLO de Nayarit sabe dar a los gobernantes que PIERDEN el piso, como tal parece comienza a sucederle al gobernador de Nayarit, Roberto SANDOVAL.
Sucede que el día 19 de marzo próximo pasado, se llevó a cabo una de esas CABALGATAS a las que es tan aficionado Roberto SANDOVAL, una cabalgata a la que se dieron cita CENTENARES de hombres y mujeres de a caballo, por allá en el municipio de Santa María del Oro, hecho que voy a relatar sin más, tal como me narraron personas que estuvieron presentes y que hago del conocimiento de la opinión pública, por lo cual corro el inminente riesgo de incorporarme al grupo de los “ENVIDIOSOS” a que hizo referencia el señor gobernador para referirse a quienes CRITICAMOS su actuación como gobernante. Ahí va pues.
Como lo señalé, el pasado 19 de marzo se llevó a cabo el evento mencionado del cual se NARRAN estos hechos: “Fue HUMILLANTE para los que cabalgaron porque el señor gobernador se paseó en caballos PURA SANGRE, caballos FINOS bien tratados, mientras que el RESTO de los participantes cabalgaron en humildes BURRITOS y caballos de TRABAJO porque se les había convocado a una CONVIVENCIA social y NO a un ESPECTÁCULO exhibicionista”. Los narradores de este hecho, continúan así, su dicho: “El señor gobernador llegó DOS horas RETRASADO y lo hizo realizando un despliegue de FUERZA para participar en caballos cuyos precios se sitúan en MILES de DÓLARES ataviados con monturas de LUJO de incalculable valor. El señor CAMBIÓ tres veces de CABALLO, desde el lugar del inicio de la cabalgata en el ejido de La Labor, perteneciente al municipio de Santa María del Oro nos mostró que parte de su COLECCIÓN de caballos a un grupo de hombres y mujeres POBRES, que habíamos hecho un esfuerzo de participación, lo cual consideramos fuera de sitio y una demostración de SOBERBIA”. Los narradores continúan diciendo: “Estos DOS hechos, la IMPUNTUALIDAD del gobernador y la demostración de PODER con sus caballos PURA SANGRE, generó comentarios e INCONFORMIDAD en la GENTE que estaba presente, en particular de las AMAZONAS (damas jinetes) que estuvieron expuestas al SOL del mediodía”.
Acto seguido quienes me narraron el hecho, afirman: “Culminó dicha CABALGATA en el ejido de Mojarras, exactamente en el CORRAL de toros y de acuerdo a lo acordado con el Presidente del Comisariado Ejidal, enseguida debería realizarse un ACTO en un lugar que se había habilitado para tal efecto, siendo MAYÚSCULA su SORPRESA cuando al arribar ahí, se encontró con un espacio DESOLADO en el que lo esperaban un ESCASO grupo de personas, ante lo cual el gobernador NO pudo disimular su ENOJO, procediendo de inmediato a ABANDONAR el lugar” Hasta aquí el relato.
Más allá de un comentario MORDAZ, para lo cual se presta la escena, vamos a una reflexión, que iniciamos con algunas pregunta: ¿La EXHIBICIÓN de caballos PURA SANGRE o de FINO LINAJE es consustancial (forma parte) del conjunto de comportamientos al que deberemos acostumbrarnos en el llamado “GOBIERNO de la GENTE”? Si así comienza este sexenio, ¿qué debemos esperamos los nayaritas en los próximos años?, ¿acaso la IMPUNTUALIDAD ante el PUEBLO formará parte del PROTOCOLO de este gobierno? Comparto plenamente el comentario de quienes me narraron este acontecimiento, en el sentido del INNECESARIO y HUMILLANTE despliegue de FUERZA ante un grupo de hombres y mujeres HUMILDES, que estaban para una convivencia SENCILLA, de GENTE del CAMPO, ejidatarios, jornaleros y amas de casa que NO se merecían ni la IMPUNTUALIDAD, ni la muestra EQUINA digna de JEQUES árabes y HACENDADOS porfiristas.
Si en el gobierno del estado que preside Roberto SANDOVAL existe ánimo de escuchar y de verdad hacer un gobierno de la GENTE, como tanto se PREGONA, sería correcto que dejaran de hacerse esas OFENSIVAS exhibiciones de CABALLOS PURA SANGRE o de FINO LINAJE entre CAMPESINOS que a veces SOBREVIVEN en un CAMPO que se encuentra en la RUINA. Por otro lado, es de elemental CORTESÍA y CABALLEROSIDAD, llegar a tiempo y tratar a los invitados con HUMILDAD y RESPETO; en caso de NO ser así, los gobernantes recibirán el RECHAZO de la GENTE, sobre todo de aquellas personas que ya NO están dispuestas a ser tratadas como PEONES de HACIENDA en la época en que gobernaba el DÉSPOTA dictador Porfirio Díaz.
