30 mil muertos, 50 mil huérfanos y un país aterrorizado
Calaveras de REPUDIO para los SEÑORES de la GUERRA
Dolor y muerte, se combaten con organización social
Podría, en este día tan mexicano evocar la figura de Manuel ACUÑA, el joven poeta del siglo XIX autor de uno de los poemas de mayor profundidad en la literatura nacional, luego de haber participado en una AUTOPSIA en la Escuela de Medicina de la Ciudad de México, el poema “ANTE UN CADÁVER” es en realidad un canto a la vida que encierra una reflexión filosófica de singular trascendencia, pero NO es así, o como se dice en algunas sesiones legislativas y judiciales: “NO ha lugar”, no procede.
¿Cómo CELEBRAR, FESTEJAR, este día, de tan larga tradición en México? Cada Día de Muertos, recordamos a los que han perdido la vida en una forma festiva, pero este año NO es el caso. Calderón y SU GUERRA sembraron la MUERTE en México en forma tan abierta y BRUTAL que el festejo lo posponemos para mejores tiempos. Calderón nos puso a la muerte de frente y nos recordó que esta es un hecho TERRIBLE.
Ayer, hoy, mañana, pasado mañana, NO son días de fiesta, sino de LUTO NACIONAL; en la JUERGA guerrera, la nación mexicana se DESANGRA y los mexicanos asistimos a un conflicto que SUMA cerca de 30 mil MUERTOS, 50 mil HUÉRFANOS además de DAÑOS COLATERALES que incluyen los HORRORES de toda confrontación bélica en la que policías federales disparan sus armas de fuego contra ESTUDIANTES que se manifestaban por la PAZ y contra la GUERRA en Ciudad Juárez.
Los nayaritas estábamos acostumbrados a la tranquilidad provinciana, sólo interrumpida por algún acontecimiento inusual de violencia extrema que de pronto colmaba los titulares de los diarios de circulación local e incluso nacional como fue el caso de aquella masacre de REOS cometida por el Grupo Zorros conocido como “ZORRAZO” que enlutó al estado. Ahora las noticias sobre la MUERTE VIOLENTA en las calles y caminos de Nayarit son asunto cotidiano. Todos los días la MUERTE hace acto de presencia, no por acción de la CASUALIDAD sino como resultado de la conjunción de factores económicos, culturales y políticos claramente identificados.
En fecha reciente fuimos testigos de una MATANZA, días antes, de las muertes de otros seres humanos y por todo el país aumentan a diario el número de fallecidos, desaparecidos, viudas, huérfanos en una TORMENTA de DOLOR y SACRIFICIO cuyo final NO se vislumbra. En su acostumbrado lenguaje crudo y absolutamente franco, alguna vez el general estadounidense de la Guerra de Secesión (1861-1865) William Tecumseh SHERMAN afirmó: “…y una vez que se sueltan los perros de la guerra, no se sabe a dónde va a parar todo.”, frase por cierto traída al análisis actual por Fidel CASTRO con motivo de sus comentarios al libro de Bob Woodward “Las guerras de Obama”. En el mismo tenor Sherman realizó otra afirmación en la cual bien se podrían a pensar los que AZUZAN la GUERRA : “Ustedes no pueden calificar la guerra en términos más duros de lo que yo haré. La guerra es crueldad, y ustedes no la pueden civilizar; y aquellos que llevaron la guerra a nuestro país merecen todas las maldiciones y condenas que la gente pueda verter sobre ellos”. Ciertamente una expresión DURA pero que invita a la reflexión profunda.
Las ingeniosas CALAVERAS, simpáticas composiciones en verso dedicadas a la CRÍTICA social y política, NO alcanzan para CONDENAR a quienes inducen una guerra que ESCALA en niveles de violencia a escenarios que NO habíamos imaginado los mexicanos de las actuales generaciones, aunque perfectamente los SEÑORES de la GUERRA las merecen como eficientes EMISARIOS de la MUERTE.
A pesar de todo, es posible revertir los planes de los SEÑORES de la GUERRA , con organización social, ESPERANZA y lucha por un MUNDO MEJOR.
Sí se puede.
Mi BLOG www.hseveriano.blogspot.com