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Bienvenidos a mi blog. Con mis opiniones espero fortalecer la cultura cívica de los Nayaritas.

LOPEZ OBRADOR

POLICÍA NACIONAL, ¿EL REMEDIO?

Mando centralizado

Alcaldes y gobernadores, ¿sin policía propia?

Corrupción y descomposición social NO desaparecen por decreto.

No cabe duda que cuando se ha perdido la BRÚJULA en la dirección de los asuntos del ESTADO, las OCURRENCIAS y los ACTOS de FE sustituyen al RAZONAMIENTO. La nueva ocurrencia del gobierno que preside Felipe Calderón, aplaudida por unos y RECHAZADA por los más, es la creación de una POLJCÍA NACIONAL, desde luego controlada CENTRALMENTE.

Para el Consejo Nacional de Seguridad Pública reunido recientemente contando con la presencia de gobernadores (Ney González entre ellos) y los integrantes del llamado GABINETE de SEGURIDAD, el surgimiento de una Policía Nacional resolvería problemas de CORRUPCIÓN, ineficiencia, bajos salarios y otros que aquejan al conjunto de los cuerpos policiacos en todo el país.

En palabras de Calderón, la creación de este nuevo cuerpo policial operaría como una especie de VARITA MÁGICA, pues, según sus palabras los mexicanos estaríamos “protegidos por una policía honesta y profesional, por un sistema de justicia eficaz y transparente, y por un marco legal que fortalezca a la autoridad frente a los criminales y permita castigar eficazmente a los delincuentes”. Podríamos, entonces, de acuerdo a la lógica de lo expresado por Calderón, esperar un cuerpo de policía salido de un CUENTO de HADAS.

La creación de una policía UNIFICADA plantea de entrada un problema CONSTITUCIONAL considerando que la Constitución General de la República señala ámbitos de competencia y actuación en materia de procuración y administración de justicia que deberán MODIFICARSE; además, ¿de dónde saldrían los FONDOS para el sostenimiento de una POLICÍA NACIONAL?, ¿acaso los AYUNTAMIENTOS van a cooperar? Y en este mismo nivel de gobierno, ¿entonces los alcaldes y cabildos NO tendrán AUTORIDAD para disponer de un cuerpo policiaco cuyos MANDOS estarían fuera de la jurisdicción de los gobiernos municipales?

Ahora bien, ¿alguien que conozca este país puede CREER que la sola creación de un cuerpo de policía, así, por DECRETO, garantiza su CONFIABILIDAD?, ¿será que están hablando de otro PLANETA?

O sea que el enorme poder CORRUPTOR del DINERO se va topar con la barrera de la POLICÍA NACIONAL, como si esta por sí misma ahuyentara las TENTACIONES.

En su estructura ideológica la DERECHA supone que los problemas de enorme corrupción y DESCOMPOSICIÓN SOCIAL con profundas raíces culturales, económicas y políticas son en realidad problemas de FORMA y no de FONDO. Tan es así que la sola invocación del término “policía nacional” asume carácter casi de EXORCISMO para quienes ahora se encuentran en la dirección de la administración pública federal y de la mayoría de los estados de la república.

Basta con CREER en algo, basta con invocarlo para suponer que así sucederá. ¿En serio podemos esperar una policía de alto nivel MORAL salida de un gobierno que es fruto de un FRAUDE ELECTORAL que NO ha sido capaz de ENCARCELAR o SANCIONAR y que, en cambio, encarcela a dos mujeres indígenas acusadas de secuestrar a policías federales?

En septiembre de 2008 Genaro GARCÍA LUNA titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal afirmó, ante un grupo de diputados federales integrantes de la Comisión de Seguridad Pública que una policía nacional contaría con estándares de PRIMERA CALIDAD y puso el ejemplo de las policías nacionales en Francia y España. Hasta parece una broma.

En su tiempo cuerpos policiacos convertidos a la postre en verdaderos NIDOS de maleantes y sumidas en el más absoluto DESCRÉDITO como las temibles Policía Judicial Federal y la Dirección Federal de Seguridad, también fueron motivo de ELOGIOS y encendidos discursos de parte de gobernantes que las presentaban como “lo MEJOR” de las policías mexicanas.

Los entusiasmados promotores de la POLICÍA NACIONAL por supuesto se cuidan bien de NO mencionar los antecedentes históricos de aquellos cuerpos policiacos que en su tiempo fueron el non plus ultra de las policías y que terminaron desapareciendo por la presión CIUDADANA y la exigencia de la oposición política. Pero la DEGRADACIÓN de aquellos cuerpos policiacos fue producto NO sólo de la actuación de sus mandos e integrantes sino porque formaban parte de un SISTEMA POLÍTICO DECADENTE.

Con una alta dosis de INGENUIDAD casi hasta podríamos creer que los problemas de fondo que sacuden a México encontrarían solución con acciones administrativas o con cambios COSMÉTICOS. Valga la comparación, es como si de pronto creyéramos que haciendo la CIRUGÍA PLÁSTICA se fuera detener el ENVECIMIENTO.