GOBERNAR ahora resulta ejercicio de alta COMPLEJIDAD, en ocasiones deporte de ALTO RIESGO: Hay que vérselas con la COMBINACIÓN de RETOS ECONÓMICOS, de SEGURIDAD y de satisfacción de crecientes necesidades sociales, una sociedad DEMANDANTE y un gobierno QUEBRADO. Los PRESUPUESTOS no ajustan y los AJUSTES tienen límites, NO pueden hacerse INDEFINIDAMENTE. El gobierno de México presidido por AMLO ha realizado un PLAUSIBLE como notorio esfuerzo en esa dirección, desapareciendo oficinas gubernamentales y REDUCIENDO el aparato institucional. El problema es que habrá un momento en que AJUSTAR gastos y hacer AHORROS será INSUFICIENTE. El gobierno de México ha cerrado la LLAVE del DERROCHE y el modelo permea paulatinamente a gobiernos estatales y municipales. Según se aprecia en la RETÓRICA gubernamental y los DOCUMENTOS rectores de la actividad gubernamental como el Plan Nacional de Desarrollo se trabaja a marchas forzadas por alcanzar a cimentar un NUEVO SISTEMA POLÍTICO, que NO termina de colocarse definitivamente. Por supuesto estamos en un momento histórico que exige un esfuerzo TEÓRICO que permita caracterizarlo ¿Se trata de un REACOMODO del Viejo Sistema Político?, ¿estamos ante una REVOLUCIÓN de NUEVO TIPO?, ¿caminamos por un sendero de SIMULACIÓN? La COMPLEJIDAD de la realidad actual, pletórica de situaciones INÉDITAS, con un mundo caminando por los rieles de una REDEFINICIÓN GEOPOLÍTICA, con China y Rusia DESAFIANDO la desfalleciente HEGEMONÍA estadounidense surgida del orden posterior a la Segunda Guerra Mundial, se abre paso demandando RESPUESTAS. El CAPITALISMO y su lógica de LUCRO y GANANCIAS amenaza la SUPERVIVENCIA misma de la HUMANIDAD y gobernar en tales condiciones una actividad DESAFIANTE. Para COLMO apareció una PANDEMIA provocando una CRISIS SANITARIA que dio impulso a la RECESIÓN económica.
¿En qué MEDIDA los nuevos GOBERNANTES y LEGISLADORES son conscientes de esta realidad? Y todavía más, ¿en qué MEDIDA comparten la idea de la NECESIDAD de la TRANSFORMACIÓN ante un escenario potencialmente DESASTROSO? Los dilemas y preguntas derivados del momento NO se pueden dilucidar sino a través de una INTENSA actividad TEÓRICA y PRÁCTICA que implica entre otras acciones la de GOBERNAR orientados hacia un nuevo MODELO no sólo político, sino económico y cultural. Instalados en el SIMPLISMO se adelantan respuestas FÁCILES para esta CRISIS, que comporta una COMPLEJIDAD desafiante en muchos sentidos. No estamos sino al PRINCIPIO de la TRAVESÍA transformadora que en lo sucesivo soportará PROVOCACIONES, SABOTAJES y AGRESIONES incluso VIOLENTAS en modalidades de GUERRA SIN FIN y ataques que pondrán a PRUEBA la capacidad de respuesta socialmente ORGANIZADA, una asignatura que continúa PENDIENTE por cierto, sobre todo porque una parte importante de la IZQUIERDA está ahora ENFRASCADA en INTERMINABLES litigios internos, comprensibles pero absolutamente INOPORTUNOS en este momento, no porque CAREZCAN de JUSTIFICACIÓN, sino porque el ENEMIGO sabe bien PROMOVERLOS, ocultando al mismo tiempo las PROPUESTAS de gobierno que también existen pero son DESCONOCIDAS para la mayoría del PUEBLO de México.
Combatir la CORRUPCIÓN y operar un viraje en la conducción de los asuntos de Estado para alcanzar desempeños más EFICIENTES es sólo el COMIENZO y de manera alguna puede considerarse el FIN último, sino apenas la primera parte, podría decirse.
No cabe duda que en el conjunto de las tareas y acciones INMEDIATAS figura DEMOSTRAR que CONGRESOS y GOBIERNOS surgidos de la actual COYUNTURA histórica contienen el GERMEN de una NUEVA forma de gobernar. Si así NO sucediera, el RECLAMO social será MAYÚSCULO y se habrá CANCELADO una extraordinaria OPORTUNIDAD HISTÓRICA. Las FUERZAS económicas, políticas y sociales que se OPONEN a la Cuarta Transformación están ahí, ESPERANDO por la RESTAURACIÓN.
